De la Redacción
El Buen Tono
Orizaba.- La administración del alcalde Juan Manuel Diez ha demostrado una vez más que la corrupción y el manejo turbio de los recursos públicos son la norma en su gobierno.
Y es que de manera mañosa y corrupta, Diez, junto con el cabildo, adquirió sin licitación los autobuses “Gallo” y “Búhos”, que operan violando la Ley de Transporte Público.
Estos autobuses International fueron comprados en la Ciudad de México, a la misma concesionaria que el alcalde posee en Orizaba, a pesar de ser de mala calidad y caros en su operación y mantenimiento.
Este acto representa un flagrante conflicto de interés y una clara violación de la Ley de Adquisiciones, pues los autobuses fueron comprados sin licitar, permitiendo que Diez utilizara su poder para desviar fondos públicos hacia su propio bolsillo.
Mañosamente, el mantenimiento de estos transportes ilegales será realizado por la concesionaria del propio alcalde, facturando miles de pesos a las arcas municipales.
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