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Devastación ambiental en Quintana Roo por construcción del Tren Maya y aeropuerto de Tulum

Superiberia

AGENCIA

Quintana Roo.- La construcción del Tren Maya y del Aeropuerto Internacional de Tulum ha resultado en una grave devastación ambiental en Quintana Roo. De acuerdo con documentos oficiales obtenidos por Latinus, el Ejército ha abierto 18 bancos de materiales, afectando más de 474 hectáreas.

El estudio de impacto ambiental encargado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para la terminal aérea de Tulum, junto con organizaciones ambientalistas, advierte sobre la alta agresividad de estas minas a cielo abierto. La explotación de estas minas provoca la pérdida de capas de suelo y material geológico, lo que genera un daño significativo al medio ambiente.

La Sedena planeaba extraer más de 10 millones de metros cúbicos de roca caliza, grava y arena para emplearlos en las obras del Tren Maya y del aeropuerto. Entre 2021 y 2023, la Sedena destinó 661 millones de pesos a las empresas Equipos y Maquinarias del Sureste y Explosivos Asturión para llevar a cabo las perforaciones, explosiones y extracción de estos materiales.

Las operaciones y permisos relacionados con estas minas se han manejado con opacidad. La Sedena ha clasificado como confidencial la cantidad de explosivos utilizados por las empresas en los bancos de materiales y ha reservado dicha información, lo que ha generado preocupaciones sobre la falta de transparencia en el manejo de estos proyectos.

La construcción del Tren Maya y del Aeropuerto Internacional de Tulum ha implicado una significativa devastación ambiental en Quintana Roo. La falta de transparencia en las operaciones y el impacto ambiental generado han suscitado críticas y preocupaciones tanto de la sociedad civil como de organizaciones ambientalistas.

Morena sigue y seguirá destruyendo a México; Semarnat y todas las instituciones son nada más que un remedo, una simulación, como todo en Morena. Para construir ese “trenecito” mediocre.

Sigue el Ejército saqueando y destruyendo a México.

El que dijo que no talaría ni un solo árbol, y que no se sabe a dónde han “trasplantado” miles de árboles o que reconoció que, si ha dañado los cenotes, pero prefiere echar la culpa a los ambientalistas.

Y el partido-gobierno “denuncia” que una compañía de Estados Unidos hace esta destrucción. Pero el Ejército lo hace para destruir la selva con el paso del Tren Maya.

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