La provincia argentina de Córdoba se ve nuevamente sacudida por un caso de abuso sexual, esta vez involucrando a un sacerdote de 58 años perteneciente a la congregación alemana de Schoenstatt. La Fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual, liderada por Juan Ávila Echenique, detuvo al párroco bajo la acusación de “abuso sexual ultrajante calificado por ministerio de culto”. Según el Ministerio Público Fiscal, el abuso ocurrió en el despacho del sacerdote tras una celebración religiosa.
El detenido podría enfrentar entre 8 y 20 años de prisión, dependiendo de si se confirma que el acto constituyó “sometimiento sexual gravemente ultrajante” o incluyó “acceso carnal”, como establece el artículo 119 del Código Penal. Hasta ahora, la congregación Schoenstatt no ha emitido declaraciones oficiales sobre el incidente.
Contexto alarmante: feminicidios y abuso infantil en la región
Este caso se suma a un contexto cada vez más inquietante en Córdoba. Apenas una semana antes, el pueblo de Brinkmann se vio conmocionado por el asesinato de Aralí Vivas, una niña de 8 años que fue encontrada sin vida entre los escombros de un incendio. La autopsia reveló signos de abuso y traumatismo craneal. La madre de la menor y dos hombres más han sido detenidos bajo sospecha de ser los autores de este crimen, que según la fiscalía habría sido cometido para ocultar el abuso previo.
La asociación civil Madres de la Matria Latinoamericana (Mumalá) reveló que entre enero y octubre de este año se han registrado 195 feminicidios en Argentina, destacando una situación de violencia de género y abuso que sigue afectando gravemente a la sociedad.
Estos incidentes resaltan la urgencia de abordar los abusos y la violencia de género, problemas profundos que han alcanzado cifras alarmantes en la región.