Ixtaczoquitlán.- Ante las autoridades del Juzgado Tercero quedó una mujer acusada de secuestrar, junto con dos cómplices, a un empleado de la gasera Hidrogas y, además, robar la camioneta repartidora. En las próximas horas se definirá su situación jurídica.
El trabajador de Hidrogas estuvo a punto de ser sepultado en el patio de una vivienda ubicada en la calle 1 de la colonia Fernando Gutiérrez Barrios, de Potrerillo Pueblo, según narró, pero logró liberarse de sus captores y ahora los señala
ante el Juez.
Martín Rodríguez Malpica, de 47 años, vecino de Córdoba fue interrogado ayer a puerta cerrada en el Juzgado Tercero de Primera Instancia, bajo estricta vigilancia de la Policía Estatal
y Ministerial.
Como se recordará, estos hechos ocurrieron el pasado viernes 24, alrededor de las 13:30 horas, cuando el empleado conducía una camioneta Nissan 2014, con número económico 129
de Hidrogas.
Repartía cilindros en Potrerillo Pueblo cuando fue interceptado por una mujer identificada como Guadalupe García Reyes, de 35 años, quien con la excusa de que quería un tanque lo llevó hasta su casa en la calle 1.
Cuando entró al inmueble, Martín fue amagado por dos hombres y dos mujeres, quienes lograron someterlo y amarrarlo de pies y manos, además de que lo cubrieron del rostro, le inyectaron alguna sustancia y lo escondieron en el baño de la casa.
Durante más de cinco horas el hombre estuvo dopado y al despertar escuchó cómo los presuntos plagiarios cavaban un hoyo y llevaban lo que parecía ser bultos
de cemento y cal.
Eso motivó al empleado gasero a buscar la forma de liberarse, hasta que logró alcanzar un serrucho y con esa herramienta se zafó, llamando la atención de sus captores.
Martín luchó por su vida y logró escapar, pero afuera ya no estaba su camioneta, por lo que emprendió la huida a pie, hasta donde encontró a elementos de la Policía municipal de Ixtac y
les pidió auxilio.
La versión del plagio de Martín movilizó a las corporaciones policiales estatales, municipales y al personal del Ministerio Público, los cuales, desde ese momento, iniciaron las investigaciones e ingresaron al domicilio
de Guadalupe.
La mujer explicó que Martín quiso violarla y robar en su casa, por lo que ella sólo se quiso defender, sin embargo, su relato poco convenció a las autoridades, las cuales ordenaron su detención. Horas más tarde, la camioneta de Hidrogas fue abandonada en Huatusco, por lo que fue asegurada por las autoridades y puesta a disposición del juez.
En las próximas horas el Juez definirá la situación jurídica de Guadalupe, quien tendrá que revelar el paradero de sus presuntos
cómplices.
GUILLERMO RAMOS T.
EL BUEN TONO