Matamoros.- En una audaz y descarada acción, miembros del crimen organizado detuvieron a numerosas pipas que habían importado gasolina desde Texas, obligando a los conductores a derramar el combustible por no cumplir con el pago de extorsiones conocidas como “piso”.
Los responsables de este acto, quienes se identificaron como miembros de “Los Escorpiones,” un grupo vinculado al Cártel del Golfo (CDG), utilizaron las redes sociales para amenazar a los “chapulines,” es decir, a los importadores de combustible que no cumplen con sus demandas económicas.
De acuerdo con fuentes, los tractocamiones con pipas cruzaron la frontera de manera legal entre el jueves y ayer, por el Puente Ignacio Zaragoza-Los Tomates en Matamoros.
En uno de los videos publicados por los delincuentes, se escucha a uno de ellos diciendo: “Esto es lo que les va a pasar a todos los chapulines”. En estas grabaciones, individuos fuertemente armados muestran cómo detuvieron las pipas y obligaron a los conductores a derramar el combustible en una zona apartada.
“Tenemos dinero, lo que queremos es respeto. Miren todo el piperío que tenemos,” agregó el delincuente en el video.
A lo largo de los últimos años, el crimen organizado en Tamaulipas ha ampliado su presencia en el tráfico de combustible robado o “huachicol.” Sin embargo, en los últimos meses, ha incrementado su hostigamiento contra importadores legales de gasolina.
En abril, Grupo Reforma informó que la escasez de combustibles en gasolineras de Nuevo Laredo era resultado de la presión ejercida por el crimen organizado para forzar a los propietarios a comprar “huachicol.” Esto condujo a un operativo especial conjunto del Ejército y Pemex para garantizar el abastecimiento de gasolina en la ciudad fronteriza.
Aunque desde mediados de 2021 el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador militarizó la administración de las aduanas en Tamaulipas, organizaciones empresariales en el estado han denunciado que el tráfico de migrantes, drogas, armas, y otros tipos de contrabando no se ha detenido.
“Los Escorpiones,” con base en Matamoros, han emprendido una guerra narcótica este año contra “Los Metros” de Reynosa por el control del CDG, y por el dominio sobre los territorios y las aduanas mexicanas que son utilizadas en sus actividades criminales.