AGENCIA
España.- El sector salud madrileño se conmocionó al enterarse que durante varias semanas un menor de edad se había hecho pasar por un médico de emergencias y nadie se había dado cuenta; el joven atendía a los enfermos en sus viviendas y llegó a contratar un servicio de ambulancias con el que asistía a los avisos domiciliarios.
El fraude se detectó durante el mes de agosto cuando miembros de la policía intervinieron en el domicilio de un paciente psiquiátrico acompañados por el presunto doctor. Los agentes de Seguridad Ciudadana notaron “un comportamiento extraño durante la actuación del supuesto médico, ya que en algunos momentos actuaba con seguridad y credibilidad y en otros de forma pueril”, de acuerdo con el reporte de Patricia Peiró.
La peculiar manera de actuar del “doctor” causó que se iniciara una investigación respecto la identidad y preparación médica del sujeto en cuestión. Días más tarde se comprobó que el supuesto médico era un menor de edad sin ningún tipo de titulación sanitaria.
Mientras más se investigaba el caso, más sorpresas encontraban las autoridades. El menor logró interceptar la emisora de emergencias para poder enterarse de los avisos y atender personalmente la crisis. También, logró alquilar una ambulancia con la que, al menos en una ocasión había realizado un ingreso hospitalario tras asistir y trasladar al enfermo.
La policía adjudica la posibilidad de realizar estos fraudes a la “buena labia” del joven.
Summa 112 (Servicio de Urgencia Médica de la Comunidad de Madrid) desconoce cómo el joven podía tener acceso a los avisos sanitarios y negaron tener conocimiento de que sus trabajadores se hayan encontrado con él en ninguna asistencia.
