Nahúm Bastian
El Buen Tono
Córdoba.- Vendedores de tamales aseguran que derivado de la pandemia por Covid-19, la tradicional celebración del Día de la Candelaria no tuvo el impacto que en años anteriores, esto debido en gran manera a la reducción del aforo en la situación públicos como en el caso de las iglesias, situación que provocó una reducción de pedidos de hasta un 70%.
Mariana Martínez, dedicada a la venta de este alimento típico, explicó que en años cuando aún no existían las restricciones sanitarias por el virus, algunos días antes del Día de la Candelaria ya tenía pedidos de hasta 400 tamales, por lo que ella y su familia esperaban esta fecha que se traducía en un aliciente económico.
“Toda la familia participaba en la elaboración del producto para cumplir con los pedidos, además de la venta afuera de las iglesias, pero desde que dejó de haber tanta gente en las calles por lo de la pandemia sí nos afectó mucho a quienes nos dedicamos a este oficio”, aseguró.
Otra factor importante y que repercutió su bolsillo fue el cierre de las escuelas, pues en ellas se realizaban convivios y esta era otra fuente de ingresos en esta fecha tan importante para los creyentes, “en estos momentos sólo tenemos tres pedidos, dos de cien y otro de 50 tamales y en estos días nos juntábamos todos los de la familia para realizar las entregas, pero ya ni salir queremos porque qué tal y nos contagiamos y nos sale peor”, lamentó la comerciante.
El panorama es desalentador para los vendedores de la zona, pues repercute fuertemente en la economía familiar que se fortalecía en este día, no obstante, la falta de reuniones y festejos así como la implementación de nuevas estrategias para evitar las aglomeraciones y aplicar el distanciamiento social por parte de las autoridades mermó por completo sus ventas.