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Xalapa, Veracruz.- Las redes sociales, con su amplio alcance, se han convertido en una herramienta crucial para la localización de presuntos responsables de delitos. En este contexto, ha causado gran revuelo el caso de un joven que denunció la grabación sin su consentimiento en una sucursal de la cadena Smart Fit en Xalapa, Veracruz, lo que ha generado una serie de peticiones para que se aplique la Ley Olimpia contra el agresor.
El afectado, identificado en redes sociales como @e_mc25, relató a través de la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter) que el pasado domingo 29 de diciembre se percató de que un video suyo, grabado dentro de los vestidores de la sucursal ubicada en Plaza El Juguete, había sido difundido sin su consentimiento. Según su denuncia, el material mostraba al joven en ropa interior, lo cual fue descubierto gracias a una captura de pantalla enviada por un tercero.
El denunciante explicó que supo de la existencia del video hasta que una persona le compartió la imagen, el 28 de diciembre, momento en que decidió investigar el origen del contenido. “Le pedí a la persona que me mandó el mensaje que me diera el perfil del cuál fue subido ese video”, señaló el joven en su relato.
A la mañana siguiente, el 29 de diciembre, accedió al perfil de la cuenta que había difundido el video y descubrió que no solo él, sino también otros usuarios del gimnasio, habían sido grabados en el vestidor, en ropa ligera. Además, a través de la cuenta, el afectado logró identificar al presunto responsable como Osmar ‘N’, un cliente frecuente de la cadena, quien tenía vinculadas sus cuentas personales a la cuenta que había compartido el video.
Ante la situación, el joven solicitó la intervención de la empresa Smart Fit para emprender acciones legales contra el responsable, sin embargo, hasta el momento, la cadena de gimnasios no se ha pronunciado al respecto. Este silencio ha generado indignación en las redes sociales, donde internautas han exigido la aplicación inmediata de la Ley Olimpia, legislación que busca sancionar la difusión no consensuada de contenido íntimo.
