Córdoba.- Con el secuestro y ejecución del cantante de “La Voz México”, Gibrán David Martíz Díaz, y su amigo, el menor Luis Martínez Hernández, quedó demostrada la falta de coordinación entre los diferentes cuerpos de policía, especialmente de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
Ambos jóvenes desaparecieron el pasado martes 7 de enero en Xalapa, plagiados por presuntos elementos de la Policía estatal, los cuales lograron burlar los cinco retenes o puestos de revisión que se encuentra a las salidas de la capital del estado.
El cantante y su amigo, presuntamente fueron ejecutados durante un enfrentamiento entre elementos de la SSP y un grupo delictivo en las cercanías de Huatusco, pero ¿acaso en este enfrentamiento no hubo lesionados, ni detenidos?
El grupo antisecuentro de la SSP, el cual cuenta con elementos de los mejor preparados para actuar en situaciones de riesgo, tanto en tierra, aire y agua, en ningún momento fue activado; posiblemente no fue requerido por los altos mandos, o tal vez, la ocasión no lo ameritaba, pues no se trataba de alguna demostración como las que se han llevado a cabo en otras ocasiones en El Lencero.
A 13 días de que estos jóvenes fueron privados de la libertad, este domingo, el procurador General de Justicia Amadeo Flores Espinosa, en rueda de prensa confirmó la muerte de ambos durante el supuesto enfrentamiento.
Con este doble asesinato, uno más en el estado, nuevamente quedó demostrada la ineptitud de los cuerpos policiales, en especial de la SSP.
Como dato, uno de los retenes se encuentra sobre la carretera Xalapa-Veracruz, a la altura de las Trancas; otro, a la salida de la carretera Coatepec-Xalapa, a la altura de Los Arenales; otro más en la carretera Xalapa-Perote-Banderilla, a la altura El Gallito; un cuarto retén se ubica sobre la carretera a Alto Lucero, por El Castillo, a la altura de la colonia Casa Blanca, y el último, sobre la carretera vieja Xalapa-Briones- Coatepec.
De la RedacciÓn
El Buen Tono