IMPORTANCIA DEL TURISMO EN LA ECONOMÍA EN MÉXICO.
La actividad turística en México aporta casi el doble de lo que en promedio contribuye a las economías de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
Mientras en el país aporta aproximadamente el 8.7 por ciento del PIB, para el conjunto de economías del organismo representa en promedio 4.9 por ciento.
Asimismo en México el sector provee 2.3 millones de empleos de tiempo completo, equivalentes a. 5.9 por ciento del empleo y 79.9 por ciento de las exportaciones de servicios, más que el 22 por ciento que en promedio representa para los países de la OCDE, señala el reporte “OCDE Tendencias del Turismo y Políticas 2018”.
A nivel global la industria turística ha mostrado buen crecimiento, por arriba de la economía mundial, pero se requieren políticas integradas para asegurar su competitividad, sostenibilidad e inclusividad en los próximos años, advierte el organismo internacional
En el caso de México, el documento identifica que los principales retos que enfrenta el sector turismo en México “Incluye la sustentabilidad, un entorno competitivo para los negocios, la conectividad, infraestructura y responsabilidad social”.
Destaca el Plan Sectorial para el Turismo 2013-2018 con cinco objetivos: Transformar el turismo y fortalecer esquemas de colaboración; explotar las ventajas comparativas que ofrece; facilitar el financiamiento y la generación de proyectos de inversión Público-Privado; motivar la promoción turística para contribuir a la diversificación de mercados y promoción del desarrollo sustentable de destinos turísticos con el incremento de los beneficios sociales y económicos para las comunidades receptivas.
De acuerdo con el documento, México recibió 35 millones de llegadas internacionales en 2016, un 9 por ciento de incremento respecto al año anterior con la expectativa de que esta cifra alcanzó los 37.5 millones en 2017, siendo su principal mercado Estados Unidos, seguido de Canadá y Argentina.
EL reporte señala que la actividad turística entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), creció a un ritmo más rápido que sus economías con un incremento de 4.9 por ciento entre 2012 y 2016, superando al 4.4 por ciento que en promedio ascendió el Producto Interno Bruto (PIB), global.