De la redacción
EL BUEN TONO
ACATLÁN.- Familiares del joven que fuera privado de la vida en la comunidad de Vicente Camalote, denunciaron el crimen y con ello sucedió la detención de un policía, el cual mediante un juicio fue absuelto del crimen. “Los jueces declararon inocente al único policía imputado por la muerte de Alexander, mi hijo”, dijo la madre del joven asesinado en 2020.
“Chandler”, como le decían, murió el 9 de junio de 2020, en Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca, cuando un policía municipal disparó contra el grupo de motociclistas con el que iba Alexander. A pesar de las pruebas presentadas por la Fiscalía de Oaxaca y las declaraciones de testigos, hoy no hay ninguna persona presa por este caso. Alexander tenía 16 años, era estudiante y jugaba fútbol en Tercera División en una filial de Rayados de Monterrey.
“No pudo terminar de concluir su sueño (ser futbolista profesional); él decía que quería llegar a alcanzar esa meta si Dios se lo concedía”, dijo su madre.
La Fiscalía de Oaxaca anunció que apelará la absolución del viernes, del policía que disparó contra Alexander, para que se revise la actuación deficiente de los jueces, quienes de acuerdo con la Fiscalía solo consideraron la versión de los policías.
Antecedente
El 9 de junio de 2020, a las 22:30 horas, Alexander Martínez en compañía de otros amigos se trasladaron en motocicletas a comprar refrescos y pizza para celebrar el cumpleaños de uno de ellos.
Los adolescentes iban a una tienda a menos de un kilómetro de su domicilio en Vicente Camalote, de Acatlán de Pérez Figueroa, y cuando regresaban por la carretera El Amate-Acatlán, la patrulla oficial 023 de la Policía municipal de Acatlán les cerró el paso atravesando la unidad en la calle por donde transitaban, posteriormente, con disparos lesionaron a Alexander Martínez en la cabeza ocasionando su muerte, e hiriendo a otro adolescente.
La ONU-DH aseguró que la Fiscalía General del Estado de Oaxaca no respetó algunos estándares internacionales en la investigación sobre este homicidio, entre los que se encuentran las pruebas forenses y la responsabilidad penal de los policías
involucrados.
La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México, en abril de 2021 lanzó un exhorto a las autoridades mexicanas a realizar una investigación para identificar a todos los responsables.
Esta investigación, dijo, debía respetar los estándares internaciones e incluir a los funcionarios de la cadena de mando, así como las políticas y fallos sistémicos que pueden haber contribuido a su muerte.