Río Blanco.- La violencia contra la mujer debe ser un asunto prioritario en todos los niveles, pero hasta el momento siguen pendientes acciones que permitan un cambio significativo, consideró la activista en materia de género, Lizeth Rojas.
“El liderazgo y la voluntad política son importantes, la manera más efectiva para terminar el maltrato contra ellas, es una demostración clara del compromiso de los Estados, respaldado por trabajo y recursos económicos”, expresó.
Añadió que la campaña “Únete para poner fin a la violencia contra las mujeres”, la respalda y promueve el Instituto Nacional del sector y todas las Instancias que existen en materia en el País, quienes proclamaron que el 25 de cada mes se promueva el Día Naranja y se distribuya el listón de ese color, como símbolo de frenar los ataques físicos y verbales que sufren muchas ciudadanas.
Recordó que se trata de una iniciativa multianual, que se encamina a prevenir y eliminar la violencia de género en todas las partes del mundo.
Mencionó que es una campaña que aspira a movilizar a la opinión pública y a los gobiernos, para cumplir con su objetivo principal; una visión global que sólo puede conseguirse con acciones y compromisos políticos de los gobiernos nacionales.
Dijo que una de cada tres féminas ha sido o será víctima de algún tipo de violencia alguna vez en su vida, lo que es delicado.
