Tequila.- Es necesario transitar hacia una Iglesia solidaria con los problemas de la población, que pase de lo litúrgico a la parte social, consideró el sacerdote Felipe Manuel Serrano Monarca, durante la explicación del Evangelio de ayer domingo.
Habló en relación con la necesidad de imitar aquellas actitudes del Buen Samaritano, que menciona Jesús en las Sagradas Escrituras.
“En el pasaje, Cristo lo ocupa como una enseñanza para quienes somos agentes de pastoral, como: los sacerdotes, misioneros y laicos, resalta nuestro llamado a servir a los demás, como lo hizo el personaje del que habla”, expresó el religioso.
Añadió que debe existir una Iglesia con anuncio del Evangelio en acciones concretas de diálogo y apertura, “los bautizados estamos llamados a ser una organización con cultura de la misericordia, que busque la solidaridad con una actitud de ayuda, que son los ejes de la doctrina social cristiana”.
Dijo que urge adoptar una forma de hablar, de solicitar a los fieles ser congruentes con la fe, solidarios en la búsqueda de soluciones para los problemas que enfrenta la mayoría de las personas.
Refirió que desde la Guerra Cristera se catalogó al sacerdote como actor sólo en el ámbito litúrgico, situación que hasta la fecha en la conciencia colectiva hace que se califique como político al religioso que convoque a alguna marcha o manifieste descontento sobre algún malestar social, por lo que algunos deciden mejor seguir sólo con su labor.
