AGENCIA
EEUU.- Las autoridades de Estados Unidos se incautaron en 2022 de más fentanilo del que se necesita para matar a toda la población de Estados Unidos, según ha informado la Administración de Control de Drogas (DEA), reiterando el peligro que supone este opiáceo artificial.
La DEA declaró que había decomisado 50.6 millones de comprimidos falsos con receta que contenían fentanilo, además de 4.5 toneladas de fentanilo en polvo a lo largo del año. Esto equivale a “más de 379 millones de dosis potencialmente letales”, estimó. La población de Estados Unidos es de más de 331 millones de habitantes.
El fentanilo, que hace una década sólo representaba una pequeña parte de las muertes por sobredosis, es ahora “la droga más mortífera del país”. Barato y relativamente fácil de fabricar, el fentanilo ha suplantado a los opiáceos de venta con receta y a la heroína en el mercado de las drogas ilegales.
“Se trata de un opiáceo artificial altamente adictivo que es 50 veces más potente que la heroína. Sólo 2 miligramos de fentanilo, la pequeña cantidad que cabe en la punta de un lápiz, se considera una dosis potencialmente letal”, afirmó.
Esta es la droga que está detrás de la mayoría de las más de 107 mil muertes por sobredosis que se registraron Estados Unidos entre julio de 2021 y junio de 2022, según datos oficiales.
Según la DEA, los principales proveedores de fentanilo a Estados Unidos son los cárteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Esta droga se fabrica en México con productos químicos “procedentes en gran parte de China”, según fuentes consultadas.
Parte de ella se distribuye como medicamentos de venta con receta falsificados, como Percocet, OxyContin y Xanax, según la fuente.
Alrededor del 60 por ciento de los medicamentos falsificados que contenían fentanilo analizados por la DEA contenían dosis potencialmente letales de fentanilo.