México.- Aún con boletos en las taquillas, con jugadores de América que marcan el juego ante Cruz Azul como un duelo más y con dos técnicos que suman más derrotas que victorias en su carrera, es como llega una edición más del Clásico Joven, quizás el que menos interés ha despertado en los últimos años.
Y es que más allá de sus resultados, el hecho de que se dispute en el estadio con las entradas más pobres en lo que va del Apertura 2015 y de que tanto Bueno como Ambriz sean más cercanos a la introversión que a la polémica, ha decantado en un América – Cruz Azul con pocos reflectores tras un tercio de la competencia.
“Ha bajado la intensidad del Clásico Joven, no hay un factor de morbo, no hay un Piojo, un Matosas que son técnicos mediáticos y que alimentan la polémica. Es un caso claro de que el marketing no es lo único importante cuando intentas hacer una estrategia de boletos, también influye la imagen de los protagonistas”, señaló Eric Olavarrieta, experto en imagen y quien apunta a un duelo con poco interés en gran parte como reflejo de los protagonistas en el campo.
Y es que aunada a la imagen que han tenido ambos entrenadores, hay que sumar que ninguno puede presumir de un récord ganador en su currículum, pues Ambriz tiene 66 derrotas por 56 triunfos y Bueno 108 descalabros por apenas 88 triunfos.
Los jugadores tampoco ayudan a que el bajo perfil cambie. “Es ganar, no importa el rival. Eso de humillar no me parece bueno”, fueron las palabras de un indiferente Ventura Alvarado antes de jugar un Clásico Joven.