El exluchador de la WWE, Dave Bautista, conocido por su personaje de “Batista”, volvió a captar la atención del público, pero esta vez no por sus músculos imponentes, sino por su renovado físico. Durante su aparición en el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) para promocionar su nueva película, The Last Showgirl, Bautista sorprendió a los fans con una figura más estilizada, dejando atrás el voluminoso cuerpo que lo hizo temido en los cuadriláteros de la WWE.
El 7 de septiembre, Bautista compartió la alfombra roja con estrellas como Amy Adams, Andrew Garfield y Florence Pugh, pero fue su cambio físico lo que se llevó los reflectores. Luciendo un elegante traje negro, collares y gafas de sol, el actor presentó un look más ligero, manteniendo un cuerpo tonificado, pero muy diferente al musculoso luchador que alguna vez fue.
La transformación de Dave Bautista: De la lucha al bienestar
En los últimos años, Bautista ha abrazado un estilo de vida más centrado en el bienestar, adoptando el jiu-jitsu como parte de su rutina diaria. En una entrevista reciente, explicó que su pérdida de peso, cerca de 23 kilos, es resultado de esta disciplina, lo que lo ha llevado a sentirse más saludable. Aunque tuvo que ganar peso para su papel en Llaman a la puerta, Bautista retomó su proceso de adelgazamiento mientras filmaba Dune: Parte 2, con la ayuda de su entrenador y amigo, Jason Manly.
Batista en el cine: Un actor en constante evolución
Con su papel como Drax en Guardianes de la Galaxia, Bautista se ha consolidado como un actor versátil y exitoso en Hollywood. Su disposición a transformar su físico no solo demuestra su compromiso con su carrera, sino también su capacidad de adaptación. Desde los días de lucha en la WWE hasta los sets de películas, Dave Bautista continúa desafiando expectativas y demostrando que su talento va mucho más allá del cuadrilátero.
Con su participación en The Last Showgirl, Bautista sigue sumando proyectos a su carrera, consolidándose como una figura camaleónica tanto en lo físico como en lo profesional. ¡Un ejemplo de reinvención constante!
