De la redacción
el buen tono
Amatlán.- En busca de figurar, la presidenta del DIF Municipal, Daniela Alfaro, realizó su informe un día antes que el alcalde, Luis Arturo Figueroa, “lo hizo en su afán de sentirse como alcaldesa, porque es ella quien realmente manda en el Palacio”, aseguraron pobladores.
Criticaron el hecho de que ni siquiera en la rendición de cuentas pudieron hacer equipo de trabajo.
Indicaron que se adjudicó los beneficios que otorgó a la comunidad el organismo estatal, “porque a ella los sectores vulnerables la tienen sin cuidado”.
Se refirieron a la transformación que se hizo en la nariz, “es una persona prepotente, el servicio que da en sus oficinas es malo”.
Precisaron que Daniela Alfaro es quien aprueba o rechaza las solicitudes que realizan al Ayuntamiento.