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Culpables sin castigo

Superiberia

Cómplices del desfalco a la ciudad

Aviadores, nómina inflada, administración sin transparencia, parece que a todos ya se les olvidó y no hay castigados, total, el dinero no es de ellos, el dinero es de los impuestos que pagamos todos los cordobeses 

Mauricio Delfín Domínguez, ex síndico municipal

“El que las firmó”

Más de 40 nóminas firmó como la ley lo obligaba al ex síndico y estuvo ilegalmente pagando a aviadores, a empleados que sólo estaban de bulto o que cobraban un mínimo por fuera representando a alguien que cobraba un sueldo bastante cómodo, por no hacer nada, fue en julio del 2012 cuando Delfín dijo que por cuestiones de trabajo, abandonaba su puesto como Síndico, demostrando su cobardía y su falta de honestidad y compromiso con Córdoba, porque a sabiendas de que era una administración saqueada y que tenían “aviadores”, además empleados de más de los que en verdad se requerían, él firmó de autorización para el pago de la nómina como la ley lo mandó al síndico cada quincena sin denunciar o confrontar la mala acción, volviendo también cómplice y por lo mismo culpable de los malos manejos y despilfarro de recursos que bien pudieron ocuparse para por lo menos tener un basurero, ya que ni eso tenemos. Prefirió meter la cabeza como avestruz y cobardemente salir corriendo en vez de denunciar penalmente el desfalco que estuvo autorizando casi dos años firmando nóminas infladas, llenas de aviadores.

 

Martín Becerra González, ex tesorero municipal

“El que las hizo”

Tan solo en el periodo enero-septiembre del 2012 se reveló que la administración municipal gastó 93.2 millones de pesos en salarios  y prestaciones debido a su excesiva e inflada nómina. Y así este ex funcionario hacía la nómina mes con mes y sin nunca actuar de buena fe al ver que se solicitaba la misma, nunca hizo nada por mostrarla, ahora el periódico coludido en días recientes sacó un encabezado diciendo que Rivas gastó 9 millones en pago de despidos, que no se daba cuenta cuánto pagaba cada mes a estos “aviadores” y gente que engrosaba de más la nómina, que sin ser necesarios para el Ayuntamiento sangraban mes con mes con la firma y repartición ejercida por este cómplice de Portilla.

 

Rómulo Rafael Jiménez R, encargado de la Unidad de Acceso a la Información Pública de Córdoba.

“El que no transparentó”

A pesar de los señalamientos y centenas de requerimientos de información que este medio de comunicación y varios ciudadanos estuvieron presentado al Ayuntamiento para solicitar la información de los gastos a este titular de Transparencia en la ciudad de Córdoba, desde hace más de año y medio y hasta en diciembre del año pasado el Ayuntamiento pagó una multa por no entregar la nómina con los nombres de todos los que ahí laboraban, y este señor sigue sin pena ni gloria cobrando un sueldo que devenga.

En abril cuando Portilla -el alcahuete de Lavín- quiso contender a la diputación local por la cual perdió, publicó una nómina con nombres en la página del Ayuntamiento a todas luces rasurada y maquillada, ya que en cuestión de días entraría a suplirlo en la presidencia el ingeniero Rivas y empezó el “sacadero” de personal ya que éste nuevo alcalde presumió desde un principio que limpiaría ese lugar (el Palacio municipal) que por donde revisara tenía porquería, fue así como hasta el día de hoy han salido alrededor de 300 empleados que sólo cobraban y hacían bulto, que seguramente estaban ahí por compromisos políticos con “su cuate Portilla” y con cargo a la nómina que pagamos todos los cordobeses con nuestros impuestos.

Regresando a Rómulo es incomprensible cómo tiene el cinismo de seguir en ese puesto siendo el de “transparencia”, ya que lo único que se ha demostrado es que lo que menos había era eso, al preguntarle por qué no entrega la información dice tajantemente “es que yo la solicito, pero no me la querían entregar las dependencias correspondientes a la administración cuando estaba el alcahuete; ¡vergüenza le debería de dar! a este individuo que con eso pretexta su ineptitud, ya que si él fuera una persona de valor exigiría, denunciaría o de plano renunciaría a su cargo por no poder otorgar a la ciudadanía la transparencia que es la razón de ser de su dirección.

 

Froylán Hernández Lara, ex Oficial Mayor

“El que tapaba todo”

Oooootro que se fue como si nada, fue el Oficial Mayor quien faltando 4 meses para que se terminara la presente administración y siendo partícipe del desfalco, no rindió cuentas de todo el personal que tenía contratado y que se le pagaba con recurso público, sin estar trabajando o sin ser necesario, este individuo fue de los actores principales en el papel de villano, pues era el que despedía y humillaba al personal a diestra y siniestra, incluso en los pasillos del Ayuntamiento, se escuchaban historias de que les hacía propuestas indecorosas a las mujeres, para que siguieran en su puesto, sin embargo, anda caminando en las calles como si nada y nadie lo castigó por los empleados que contrató. 

Entre sus funciones estaban participar con el Tesorero municipal, en la formulación de los planes y programas del gasto público y en la elaboración del anteproyecto de presupuesto. Programar, coordinar y adquirir y proveer oportunamente los elementos materiales y servicios requeridos por las dependencias del municipio para el desarrollo de sus funciones. ¡No se enteró nunca que eso debía hacer!, al parecer cuando lo contrataron le dijeron roba, humilla, oculta y seguirás siendo de los míos.

 

Alejandro Nieves Garnica, contralor municipal

“El Que nunca ve nada”

¿Qué hace un Contralor municipal? Planear, programar, organizar y coordinar las acciones de control, evaluación, vigilancia y fiscalización del correcto uso de patrimonio, el ejercicio del gasto público por conducto de las dependencias y entidades, su congruencia con el Presupuesto de Egresos del municipio, así como el desempeño de los servidores públicos, logrando con ello, impulsar una Gestión Pública de Calidad, en apego a las normas y disposiciones legales aplicables, para contribuir con la transparencia y rendición de cuentas a los ciudadanos.

Por lo visto, este funcionario nunca se ha preguntado qué hace un Contralor municipal, pues nada de lo mencionado anteriormente hace, este medio ha interpuesto denuncias ante esta dependencia (por si él no se daba cuenta, nosotros se lo hacíamos ver) siempre dio largas y nunca resolvió. Sigue cobrando sin hacer para lo que fue contratado.

 

Roberto de Jesús Olavarrieta Marenco “El Aviador”

VERSIÓN DE ÉL

Córdoba.- Roberto de Jesús Olavarrieta Marenco, quien fuera uno de los “aviadores” de Portilla y que abandonó el cargo antes del ingreso de Guillermo Rivas Díaz, bajo el temor de ser descubierto, ahora asegura haber desempeñado sus labores acorde a sus funciones.

Olavarrieta Marenco figuraba en la nómina municipal, bajo el cargo de Jefe de Área de Proyectos de la Dirección de Obras Públicas, en donde dijo estar a cargo de los diseños en cuestiones urbanas y de obra municipal, siendo en sus propias palabras donde “cobraba por sus ideas”, mismas que sólo lograron concretarse algunas, señalando aspectos técnicos en la remodelación del Centro Histórico, así como algunas recomendaciones para el proyecto del mercado Revolución.

Dijo, que como parte de su trabajo, realizó funciones “que no se ven”, pues que sólo se tenían que hacer en relación al cuidado de algunos detalles, como impacto de las obras a realizar y viabilidad de las mismas.

Tajantemente negó ser parte de los aviadores de Portilla, sin embargo, reconoció haberse encontrado en la nómina del Ayuntamiento, bajo el argumento de que desempeñaba una labor importante, como asesor del alcahuete de Lavín.

 

Al cuestionarle el hecho de su salida de la administración en turno, indicó que fue porque no se consideró una persona de gran utilidad, dado que Portilla ya no estaría. “Mi actividad principal siempre ha sido el ser profesor y el área del diseño, no tiene que ver con la política porque no estoy metido en eso”.

VERSIÓN DERIVADA DE INVESTIGACIÓN

Córdoba.- Uno de los tantos “aviadores” que mantuvimos los cordobeses por más de dos años, es el ex vicerrector de la Universidad Veracruzana, Roberto de Jesús Olavarrieta Marenco, quien de manera mensual se embolsaba más de 27 mil pesos.

Resulta curioso que el también familiar de la actual diputada local, Paulina Muguira Marenco, renunció el pasado 27 de marzo del presente año, días antes de que ex alcalde Portilla Bonilla dejara su encargo para buscar la candidatura a la diputación local del Distrito XVI.

            Olavarrieta Marenco, aparecía en la nómina municipal  como Jefe de Área de Proyectos de la Dirección de Obras Públicas, con un sueldo diario de 902 pesos, es decir 13 mil 532 pesos quincenales y a su vez 27 mil 65 pesos mensuales.

            Sin embargo, en la dirección de Obras Públicas son pocos los que conocen al arquitecto Roberto de Jesús Olavarrieta Marenco, y quienes lo ubican afirman que sólo iba de vez en cuando y su estadía no rebasaba ni una hora y ni escritorio tenía ni documentos emitía, es más, con nadie interactuaba.

Y es que el ex Jefe de Proyectos del Ayuntamiento cordobés, es maestro de tiempo completo desde hace varios años en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana, por lo que está claro, que solo fue un aviador más de Portilla, que mantuvimos los cordobeses.

Durante los 27 meses, el ex rector de la UV, logró embolsarse la no despreciable cantidad de 730 mil pesos, pues gozaba con uno de los mejores cargos dentro del Ayuntamiento.

Es lamentable para la Universidad Veracruzana contar con un ex rector corrupto, y actual catedrático en la Facultad de Arquitectura.

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