Miguel Ángel Contreras
El Buen Tono
Cuichapa.- Con una molienda superior al millón de toneladas de caña, ayer el ingenio San Nicolás dio por concluida una de las zafras más difíciles de la historia, debido al impacto negativo por la sequía y la poca rendición del campo.
Fueron 157 días los que duró la cosecha 2022-2023, y donde cientos de cortadores y obreros trabajaron arduamente para poder lograr la meta, aunque no era la esperada a un inicio de la temporada.
A las 00:30 de la mañana de ayer, arribó el último camión cargado de vara verde, para ser procesada y convertida en azúcar; los cuetes retumbaron por toda la comunidad anunciando el fin del ciclo azucarero.
“Agradezco a todos los cortadores, choferes, comisariados, productores y todo trabajador en general que tuvieron fe, a pesar de esta circunstancia que nos encontramos, sacamos el trabajo a flote, para el año próximo ciclo esperamos más frutos” puntualizó la gerencia.
La afectación ante la falta de trabajo será menor, porque inicia una nueva etapa en el campos, toda vez que el trabajador tendrá diferentes actividades en las siembras aunque el ritmo será bajo “los trabajadores empiezan a cultivar las cañas, el cortador tendrá que trabajar, ya no igual pero si tendrá labores”.