De la Redacción
El Buen Tono
Xalapa.- El Censo Nacional de Gobierno Federal y Estatal (CNGF-E) 2024 expone que el 63% de los contratos del gobierno de Veracruz fueron adjudicados de forma directa, lo que significa que la mayoría de estos contratos no pasaron por procesos de licitación pública.
Según los datos, durante 2023, la administración de Cuitláhuac García Jiménez registró un total de 5,587 contratos. Del total, sólo el 15.2% fueron adjudicados mediante invitación a tres proveedores, el 2.9% a través de licitaciones regionales o estatales, y el 4.7% mediante licitaciones públicas nacionales.
Esta problemática no es nueva. En 2019, la contralora general, Mercedes Santoyo Domínguez, reconoció que la mayoría de las obras licitadas en la administración de García Jiménez fueron adjudicadas directamente.
¡TONTOS!
Una empresa que compra sin cotizar actúa de forma tonta, ya que no tiene forma de saber si el proveedor le ofrece un precio competitivo o excesivo. Del mismo modo, un gobierno que adjudica una obra pública sin licitar, es un gobierno no pone a todos los constructores a “pelear” precios para que den el mejor costo.
Cuando una obra se asigna directamente a un contratista, este puede inflar los costos, ya que no enfrenta competencia. Esto fomenta la corrupción, pues roba el constructor y roba el gobernador, y eso está prohibido.