ORIZABA.- De un total de 10 películas piratas que se venden en la ciudad cuatro son cintas de contenido pornográfico, según un estudio universitario de la facultad de psicología de UGM, campus Mendoza, quienes sostuvieron que se muestran las tendencias y preferencias de la población.
El carecer de costo fijo, otorgar la gracia del anonimato y, por qué no, dejar volar la imaginación a través de fotografías y palabras provocan que la piratería pornográfica de video sea el arma aliada de esta industria fílmica subterránea, de acuerdo al trabajo académico, coinciden en que la falta de una legislación en México y, por lo tanto, en Veracruz, que regule los contenidos permite la aparición de temas que alientan a la prostitución y por ende la industria de la piratería pornográfica en películas.
Estudiantes y catedráticos de esa universidad refieren que los sitios de descarga de películas on line permiten no solamente a quien los ofrece sino también a quien los busca, despojarse de tabús que en la vida real persisten.
El buscar servicios sexuales en la calle implica tratar a una sexoservidora y conocerla mejor en la intimidad, por el contrario, en la red social la proveedora del servicio da detalles explícitos de qué hace, qué no hace y el costo, además de que suelen anexarse imágenes pornográficas que convenzan del “producto”.
En los llamados puestos de películas piratas uno acude directamente con el tendero, solicita un catálogo y listo, se puede comprar una película sexual, a bajo costo. Al respecto, las ventas en este segundo semestre han alcanzado grandes cantidades porque se dispararon en un 50 por ciento, se conoció en un muestreo en los puestos de películas.
Profesores especializados en esas áreas refieren que al no haber ninguna norma que regule los contenidos de Internet, prácticamente todos los sitios de omitir información sobre quién publica o poder manipular esa información, mentir sobre la identidad, permite que de manera desmesurada se puedan ver ese tipo de anuncios e incluso adquirir los servicios a bajo costo.