De la redacción
El Buen Tono
Región.- La violencia en nuestro país, y particularmente en el estado de Veracruz, continúa siendo un problema latente que afecta a toda la población. Helkyn Enríquez Báez, vocero de una de las Diócesis de la región, expresó su preocupación por los recientes hechos de violencia, incluyendo un linchamiento en Yucatán, y enfatizó la necesidad urgente de reconstruir el tejido social. “Hemos visto actos de barbarie y, ante esto, hay mucho por hacer. Todas las instituciones que colaboramos en la educación de las personas debemos seguir creciendo la conciencia colectiva del respeto a la vida humana y el conocimiento de los Derechos Humanos”, declaró.
Subrayó que es fundamental cambiar la cultura de la violencia, la agresión y la polarización que ha aumentado en los últimos años para lograr una reconciliación que propicie un ambiente sano y tranquilo. “Es esencial que los niños y jóvenes puedan desarrollarse de manera integral y pacífica”.
“La solución no viene por decreto, hay que construirla entre todos: gobierno, iglesias, escuelas, medios de comunicación y familias”, agregó. Este llamado a la acción surge en un contexto donde la sociedad ha denunciado un inicio de año alarmante, con reportes de desapariciones de mujeres y feminicidios que añaden presión a la necesidad de un cambio social.
