Agencias
Chiapas.- En Frontera Comalapa, Chiapas, la situación de inseguridad ha alcanzado niveles críticos. Grupos criminales han intensificado su control en la región, realizando reclutamientos forzosos de niños, jóvenes y adultos para bloquear caminos y repeler a bandas rivales. Esta medida, implementada desde el 4 de septiembre, ha causado una severa crisis humanitaria: la población está confinada en sus hogares, enfrentando escasez de alimentos y la falta de acceso a servicios básicos, como salud y educación.
Organismos de derechos humanos, agrupados en la Red Todos los Derechos para Todas y Todos, han denunciado la desaparición masiva de personas debido a este reclutamiento forzoso. Los residentes informan que los grupos armados están pasando de casa en casa para reclutar a los ciudadanos bajo amenazas de violencia, extorsión y asesinato. La situación ha llevado a un colapso en la vida cotidiana, con bloqueos de carreteras y una creciente presión sobre la población.
Ante esta emergencia, los organismos han solicitado al presidente Andrés Manuel López Obrador y a otros funcionarios federales la creación de un corredor humanitario. Esta medida busca garantizar la evacuación segura de los habitantes atrapados y proporcionar asistencia a los afectados, mientras se implementan estrategias para desarticular a los grupos criminales responsables de la violencia en la región.