De la Redacción
El Buen Tono
Cosolapa.- El Ayuntamiento enfrenta críticas por adjudicar contratos de obra pública a empresas constructoras con vínculos cercanos a funcionarios locales.
Este tipo de favoritismo, que denunciaron habitantes y actores políticos, cuestiona la transparencia de la gestión, pero también la calidad y el costo real de los trabajos que entregan.
El municipio, que lidia con problemas serios como el dengue, y la falta de infraestructura, tiene prioridades que favorecen a unos cuantos en lugar de centrarse en las necesidades de la comunidad.
En lugar de licitar de manera abierta y transparente las obras públicas, se convirtieron en un negocio redondo para empresas cercanas a la administración de Patricia Páez Franco, dejando de lado el interés colectivo que existe.
La asignación discrecional de contratos compromete la calidad de las infraestructuras, y promueve un ambiente de corrupción e impunidad, lo que daña la confianza pública en sus autoridades.
Cosolapa, como muchos otros municipios de Oaxaca, necesita obras que impacten positivamente en la calidad de vida de los ciudadanos, no un sistema clientelar donde las obras se reparten entre amistades y aliados políticos.