Cuitláhuac.- En abonos y pagos en especie, es como cobra por “fuera” el regidor primero del Ayuntamiento, Anatolio Clavijo Luna, a los comerciantes por el cambio de uso de suelo, castigándolos con sellos en multas que van hasta los 8, 10 mil o más dependiendo el giro, a quienes no acaten las órdenes del funcionario.
Así es como trabajan los ediles, que ayer fueron puestos al descubierto, al clausurar un restaurante bar de la avenida 3, en pleno Centro del municipio, haciendo abuso del poder que les brindó el pueblo.
Y es que los encargados de Comercio, por órdenes de Clavijo Luna, sellaron este comercio durante la madrugada, tiempo en que ya estaba cerrado, para no dar tiempo a sus propietarios de oponerse al atropello.
“Desde hace varios meses nos pidieron el cambio de uso de suelo, y que teníamos que pagar 1 mil 200, pero eso no es posible, si ya se contaba con anuencia, es obvio que ese permiso estaba más que confirmado”, dijo el agraviado.
Quien aseguró que hace unos días Clavijo Luna les exigió un pago de 8 mil pesos para no cerrarles el lugar y que podrían hacerlo en cómodos pagos semanales, sin un documento de por medio o recibo de Tesorería.
“El regidor fue y nos pidió ocho mil en pagos, de lo contrario entrarían cosas peores o que nos atuviéramos a lo que pudiera pasar, porque quizá hasta nos salía más caro”, dijo el propietario de restaurante-bar.
Encargados de la cervecería y propietarios del lugar, tardaron más de seis horas esperando la llegada del alcalde Ambrosio Borbonio Ane y de otros funcionarios para arreglar la situación, a quien también le dieron a conocer el soborno del cual fueron objeto por parte del regidor, quien ha convertido a la regiduría de Comercio en un negocio personal.
Y es que para nadie es oculto que a Clavijo Luna le fue “regalada” la anuencia del kiosco café, donde atiende personalmente, olvidándose de las razones por las que llegó al Palacio municipal, que es la de servir al pueblo, y “no servirse del pueblo”.
José Vicente Osorio
EL BUEN TONO
