Rafael Delgado.- Una planta de tratamiento de aguas residuales en desuso será convertida en un centro cultural.
Durante seis años esa instalación sirvió para almacenar agua y cultivar larvas de mosquitos transmisores de enfermedades, como el dengue.
Sin embargo, nunca funcionó y ahora la transformarán en sitio donde se lleven a cabo eventos que enaltezcan el espíritu.
Está ubicada en el espacio natural llamado Las Sirenas, ahí invirtieron recursos del Gobierno de la República por medio de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El síndico, Gilberto Isidro Carrillo, recordó que esa obra serviría para evitar la contaminación del río Matzinga, aunque nunca operó por diversas fallas de planeación y construcción, sin que autoridades pasadas hayan fincado responsabilidades a los ex funcionarios de hace seis años.
Desde entonces de manera permanente brindan un tratamiento al líquido que está estancado con el objetivo de no dejar que se produzcan los mosquitos transmisores de enfermedades como el zika.
Las instalaciones están inconclusas; toda la inversión fue a parar a la basura, dijo la fuente.