Una emotiva noche, cargada de un sinfín de emociones y de mucho amor hizo que Cristina Rodríguez Esquivel e Iván Ruiz Hernández vivieran el día más feliz de su existencia al llegar al altar para contraer nupcias bajo el sacramento del matrimonio.
La tarde noche del pasado 18 de abril fue única, ya que bajo la misma convicción se presentaron en el altar de la Catedral de la Inmaculada Concepción para por fin jurarse amor eterno.
Emocionado por ese momento llegó anticipadamente Iván Ruiz acompañado por su madre Celia Hernández y su hermano Edgar Luis.
Luciendo bella para ese día tan especial y reflejando una gran sonrisa en su rostro apareció Cristina quien del brazo de su padre Fernando Rodríguez se condujo al altar no sin antes, recibir de su madre Aída Esquivel Pacheco la bendición.
Sabias fueron las palabras del sacerdote oficiante quien llegado el momento los unió bajo el sacramento del matrimonio para después recibir del cortejo nupcial los símbolos de unión.
Tras la celebración nupcial y una vez convertidos en marido y mujer los nuevos esposos compartieron con sus familiares y amigos esa ocasión, en medio de una grata celebración, en la que recibieron los mejores deseos para su nueva vida.