Nogales.- La Procuraduría de Medio Ambiente (PMA) del Gobierno del Estado obligó a responsables del relleno sanitario regional de las Altas Montañas a construir una planta de tratamiento de lixiviados, tras confirmar el derrame y contaminación de mantos freáticos a consecuencia de dichos desechos.
Álvaro Jiménez Sánchez, delegado regional de la dependencia, informó que los lixiviados o jugo de la basura son altamente contaminantes, por lo que una vez hecha la denuncia pública se atendió de inmediato el tema.
“Representan el mayor riesgo de contaminación del agua y por ello la Procuraduría, junto con la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), hizo una visita con anterioridad con la finalidad de que establecieran una planta de lixiviados”, precisó el entrevistado.
Hace quince días, precisó, vinieron funcionarios a verificar el funcionamiento de dicha planta, lo cual hace al tiradero cumplir con las normas para el manejo de Residuos Sólidos Urbanos (RSU).
“Dicha planta hace un reciclamiento de las aguas que escurren de la basura y de esta manera son reutilizadas para la degradación de la misma, obviamente con la instalación de una geomembrana que es la que permea el suelo de esos contaminantes”, detalló Jiménez Sánchez.
La planta de tratamiento de lixiviados, indicó, tiene una extensión de 50 metros de ancho por 75 de largo y tres metros de profundidad, la cual permite no sólo el reciclamiento del agua sino también recolección de bacterias, lo que hace reducir la contaminación del agua en quince días.
Noe Carrillo
El Buen Tono
