CD. DE MÉXICO.- El Gobierno de Estados Unidos dio un golpe más a las redes criminales de Rafael Caro Quintero, y reiteró su compromiso de llevarlo ante la justicia de su país y no parar hasta desmantelar su organización criminal.
Este miércoles, el Departamento del Tesoro y la DEA designaron a la mexicana Diana Espinoza Aguilar (alias Altagracia Espinoza Aguilar), identificada como pareja y prestanombres de Caro Quintero, con la figura de Narcotraficante Especialmente Designada, de conformidad con la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros (Ley Kingpin).
A través de un comunicado, se informó que Espinoza Aguilar actúa a favor o en nombre del capo, en cuanto a la posesión de ciertos bienes y realización de actividades comerciales, por lo que todos los bienes e intereses de la mexicana, bajo jurisdicción de Estados Unidos, quedan congelados, y a los estadounidenses se les prohíbe participar en transacciones con ella.
También acusó que “mientras estuvo en prisión (en México), Caro Quintero continuó sus relaciones con las organizaciones mexicanas de narcotraficantes y utilizó una red de familiares para invertir su fortuna ilícita en empresas aparentemente legítimas y desarrollos inmobiliarios en la ciudad de Guadalajara”. “Caro Quintero continúa involucrado en actividades de tráfico de drogas desde su liberación”, asegura Estados Unidos. Sobre los vínculos entre Diana Espinoza Aguilar y el capo, señaló que éstos iniciaron en 2008, cuando estuvo encarcelada en la prisión de Puente Grande, Jalisco, donde conoció a Caro Quintero. Espinoza Aguilar posee algunos bienes de Caro Quintero bajo su nombre, obtenidos con las ganancias del negocio de tráfico de drogas.