AGENCIA
Quintana Roo, México.- Agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) confiscaron un cachorro de tigre de bengala a una persona que viajaba en un taxi, durante una inspección en un retén en los límites de Quintana Roo. El ejemplar, una cría macho de poco más de 30 días de nacido, fue entregado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para su resguardo.
El cachorro de tigre, identificado científicamente como *Panthera tigris*, contaba con un microchip como medio de marcaje y la documentación que acreditaba su procedencia legal. Sin embargo, el lector de microchips no arrojó datos correspondientes al felino, lo que llevó a las autoridades a confiscarlo.
El personal de la Profepa trasladó a la cría a una instalación de manejo de vida silvestre para proporcionarle la atención requerida. Al revisar su estado, se encontró que el tigre estaba sediento y hambriento, aunque en buen estado de salud. Por ello, se decidió dejarlo bajo el resguardo del sitio para su cuidado.
La Profepa destacó que se ha detectado la llegada de cachorros de felinos al Aeropuerto Internacional de Mérida, provenientes de criaderos del centro del país. Estos cachorros son luego transportados por carretera hacia Quintana Roo para su comercialización. Este incidente subraya la necesidad de una mayor vigilancia y control para combatir el comercio ilegal de animales exóticos.
Este caso pone de manifiesto la importancia de las inspecciones en retenes y otros puntos de control para detectar y prevenir el tráfico ilegal de fauna silvestre. La Profepa continuará con sus esfuerzos para garantizar la protección de los animales y aplicar las sanciones correspondientes a quienes participen en estas actividades ilegales.
La comunidad debe estar alerta y reportar cualquier actividad sospechosa relacionada con el tráfico de vida silvestre para apoyar las acciones de las autoridades en la conservación y protección de la fauna.
