AGENCIA
Francia.- Un tribunal de Francia ratificó hoy miércoles la condena a tres años de prisión contra el expresidente Nicolas Sarkozy en el marco de un caso de corrupción y tráfico de influencias en una trama de escuchas telefónicas, después de que el mandatario apelara la sentencia en diciembre.
El Tribunal de Apelaciones de París señaló que dos de los tres años de la sentencia quedan suspendidos, mientras que el expresidente no tendrá que entrar en prisión, ya que el otro año de sentencia en firme, podrá ser cumplido en arresto domiciliario y con brazalete electrónico, según recogió FranceInfo.
Sarkozy verá además suspendidos sus derechos civiles durante estos tres años, por lo que no podrá optar a cargos electos.
Su abogado Thierry Herzog y el exmagistrado Gilbert Azibert fueron igualmente sentenciados a tres años de cárcel, mientras que Herzog tendrá prohibido ejercer su profesión durante este periodo.
“Herzog y Sarkozy son abogados y Azibert es un especialista en procedimientos penales. Ninguno de los tres puede pretender que desconoce las infracciones cometidas”, dijo la presidenta del tribunal, Sophie Clement.
Sarzoky fue condenado en marzo de 2021 por delitos de corrupción y tráfico de influencias después de que la Justicia francesa considerase probado que hizo uso de su posición para tratar de obtener información sobre una investigación.
La Fiscalía acusó al expresidente de obtener en 2014 a través de Herzog información secreta, para lo cual habría recurrido a Azibert, entonces en el Tribunal de Casación.
Dos años después de abandonar el Elíseo, Sarkozy trató de obtener beneficios judiciales de un alto magistrado, algo que salió a la luz por las escuchas telefónicas a las que estaba sometido en otra investigación.
La sentencia es particularmente dura con Sarkzoy, porque, según explicó la presidenta del tribunal, “se benefició de su estatus de expresidente (…) para obtener un beneficio personal”.
El caso, prosiguió, “atenta contra la confianza que los ciudadanos pueden legítimamente esperar de la justicia”.
El expresidente, que gobernó Francia entre 2007 y 2012, se convirtió en el primer antiguo jefe de Estado en sentarse físicamente en el banquillo de los acusados, ya que aunque en 2011 su antecesor en el Elíseo, Jacques Chirac, fue condenado a dos años por delitos cometidos durante su etapa como alcalde de París, nunca llegó a pisar los tribunales por motivos de salud.
Se trata de un nuevo revés judicial para el hombre que presidió Francia entre 2007 y 2012, condenado también a una pena de un año de cárcel en septiembre de 2021 por la financiación irregular de la campaña electoral para las presidenciales de 2012.
Sarkozy encara un tercer frente jurídico, puesto que la Fiscalía Nacional Financiera solicitó la semana pasada que comparezca por la financiación de su campaña presidencial de 2007 con fondos del régimen libio de Muamar Gadafi.