Carlo Alberto Capella, sacerdote y ex consejero de la nunciatura en Washington, fue condenado a cinco años de prisión y le fue impuesta una multa de cinco mil euros, esto por posesión y transmisión de material pornográfico infantil.
El sacerdote confesó que intercambió pornografía infantil a través de una red social.
El sacerdote, arrestado formalmente el 7 de abril pasado, prestaba servicio en la nunciatura apostólica de Washington, cuando la diplomacia de Estados Unidos advirtió a la Santa Sede de sus sospechosas actividades en internet.
De inmediato, el religioso fue convocado al Vaticano y se le inició un proceso judicial según la ley firmada por el Papa Francisco en 2013, y la cual tipifica por primera vez en el ordenamiento judicial vaticano el delito de posesión y distribución de pornografía infantil.