- TRAS LA PANDEMIA
- De ser un día de júbilo, el 3 de mayo pasó a ser una fecha en la que el desempleo está presente
- En las construcciones, la cruz es colocada y bendecida, para después, ser “agasajados” por los patrones
CÓRDOBA.- Los trabajadores de la construcción celebraron ayer el tradicional Día de la Santa Cruz, pese a la pandemia y la difícil situación económica que atraviesan al contar con muy pocas obras en el municipio, lo que les ha provocado un duro golpe a su bolsillo que afecta directamente a sus familias.
Alejandro, de 45 años de edad, ha sido albañil gran parte de su vida y asegura siempre haber estado a gusto con su oficio; sin embargo, con la llegada de esta pandemia, su vida dio un vuelco importante que incluso lo orilló a salir de la ciudad en busca de empleos en otras construcciones.
“En la esta ciudad ya no hay tantas obras como antes, necesitamos salir de aquí para ganarnos unos extras, nuestro trabajo siempre ha sido pesado, pero sabemos que si le echamos ganas, pues también nos va mejor, tristemente con la pandemia bajaron más las construcciones y, pues también el dinero en nuestra bolsa”, lamentó.
De ser un día de júbilo, el 3 de mayo pasó a ser una fecha en la que el desempleo está presente y pocos tendrán una cruz que ubicar en lo alto de la obra para adornarla con flores y coloridos listones; para ellos esta fecha es importante, pues celebrarla es augurio de trabajo constante y la protección en la obra.
En las construcciones, la cruz es colocada y bendecida, para después, ser “agasajados” por los patrones (algunos más consentidores que otros), quienes en ocasiones les proveen de carne, tortillas y la tradicional cerveza, para mitigar un poco el calor que recompensa tremendo esfuerzo físico.
Algunos trabajadores de la construcción, se entusiasmaron, pues hace un año, el semáforo epidemiológico no les permitió celebrar como se debe; sin embargo, en esta ocasión algunos pudieron darse el lujo de festejar al terminar sus labores.