Efraín Hernández
El Buen Tono
Xalapa.-La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, dejó en claro que no permitirá la participación de ningún miembro de la familia Yunes en las próximas elecciones, representando a Morena en el estado.
Este rechazo obedece a tensiones históricas, particularmente a las maniobras políticas de Miguel Ángel Yunes Linares, padre del enfermo Chiquiyunes, quien durante el inicio de su campaña para la gubernatura, organizaba gritonizas en cualquier lugar donde Rocío Nahle se presentaba.
Aunque cobardemente Miguel Ángel Yunes intenta mantenerse “sin hacer ruido”, la mandataria estatal se mantiene firme en su decisión de cerrar las puertas de Morena a esta familia. Al ser cuestionada por un periodista sobre si estaría dispuesta a reunirse con Yunes Linares para favorecer la estabilidad en el estado, Nahle respondió: “No me voy a sentar (…) porque yo no puedo normalizar la violencia hacia las mujeres en ningún momento pero tampoco estaré tocando el tema”.
Esteban Ramírez Zepeta, dirigente estatal de Morena, respaldó la postura de Nahle al asegurar que el partido no tiene vínculos con los Yunes; subrayó que la prioridad de Morena es construir candidaturas sólidas y confiables, dejando de lado a figuras corruptas.