Córdoba.- Por encima de lo que padecen los migrantes a su paso y lo que aún viven desde el éxodo anterior, Mirna Herrera salió de Guatemala en busca del ya famoso “sueño americano”, aferrada a la fe en Dios de poder llegar a su destino.
Mirna, forma parte del primer grupo de migrantes que hizo parada en Rancho Trejo el pasado sábado, provenientes de Tierra Blanca.
Junto a su esposo y dos hijos: uno de 3 y otro de 6 años, emprendieron el pasado 14 de enero este viaje, ‘expulsados’ de su País de origen por la falta de oportunidades, a más de 20 días de viaje, no se desanima.
Su objetivo va más allá de llegar a Estados Unidos dice Mirna, su sueño es construir un patrimonio, tener una casa propia y que sus hijos puedan tener un mejor futuro, que el que encuentran en Guatemala, donde no hay trabajo y los pocos que existen están mal pagados.
Sin embargo, saben que en esta nueva travesía que emprenden, existen riesgos que van desde los asaltos hasta ser presas de la delincuencia organizada, aún así, su necesidad fue mayor al miedo.