Agencias
EU.- El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, aterrizó este miércoles en Canberra, Australia, después de 14 años de lucha legal. Fue recibido calurosamente por su esposa, Stella, su padre y seguidores. Assange pasó más de cinco años en una cárcel británica y siete asilado en la embajada de Ecuador en Londres, resistiéndose a la extradición a Suecia por acusaciones de agresión sexual y a Estados Unidos por 18 cargos penales relacionados con la publicación de documentos clasificados.
Assange se declaró culpable de un cargo de conspiración para obtener y divulgar documentos de defensa nacional de EE.UU., aceptando que violó el estatuto de espionaje. A pesar de esto, afirmó que creía estar protegido por la Primera Enmienda de la Constitución de EE.UU., que protege la libertad de expresión. La jueza Ramona V. Manglona aceptó su declaración y lo puso en libertad, destacando que no hubo víctimas personales de sus acciones y deseándole un feliz cumpleaños anticipado.
El regreso de Assange a Australia fue facilitado por años de esfuerzos diplomáticos del gobierno australiano, según el primer ministro Anthony Albanese. Aclamado como héroe por sus seguidores, Assange agradeció el apoyo y afirmó que el trabajo de WikiLeaks continuará. Su liberación marca el fin de una saga que expuso cuestiones de libertad de prensa y derechos humanos a nivel mundial.
