Agencias
México.-En Guerrero, México, la violencia generada por organizaciones criminales ha obligado al cierre de al menos 80 escuelas de educación básica. Este impacto directo se manifestó dramáticamente en Coyuca de Benítez, región Costa Grande, donde 20 escuelas suspendieron clases presenciales después de que un comando armado irrumpiera en tres instituciones educativas, asaltando a cuatro maestros a punta de pistola. Este acto de violencia no solo interrumpió la educación sino también dejó a los maestros despojados de sus pertenencias y vehículos, exacerbando el clima de miedo en la comunidad.
La Secretaría de Educación Guerrero (SEG) y la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) han condenado estos actos, exigiendo que las autoridades brinden mayor seguridad a las escuelas, su personal y estudiantes. La situación ha llevado a la implementación de clases virtuales como medida de contingencia, afectando no solo a las escuelas de Coyuca de Benítez sino también a otras áreas afectadas por la violencia, como Chichihualco y comunidades en la ribera del río Balsas, las cuales también han visto interrumpidas sus actividades educativas presenciales desde 2023.
El secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, informó que a pesar de estos retos, la mayoría de las escuelas en Guerrero continúan con clases presenciales, siendo solo un pequeño porcentaje el que ha recurrido a la modalidad virtual. Sin embargo, la persistencia de la violencia en ciertas regiones resalta la necesidad urgente de estrategias integrales de seguridad y educación que protejan a la comunidad escolar y permitan el desarrollo continuo y seguro de los procesos educativos.
