Construido en 1956 en medio de la Guerra Fría, el inmueble colosal primero se llamó Estadio Central Lenin, nombre que fue sustituido por el de Luzhnikí tras la caída del régimen soviético. En 1980 fue sede los Juegos Olímpicos y en 2017 lo remodelaron para modernizarlo sin tocar su fachada, que es un símbolo de la Ciudad de Moscú.
LA RAZON