CDMX.- Según revelaron algunos informes, 12 años antes de que fuera designado como candidato del PRI a la Presidencia de la República y asesinado tras un mitin en Tijuana, Baja California, Luis Donaldo Colosio Murrieta fue espiado por elementos de la Dirección Federal de Seguridad (DFS) en 1982, cuando este organismo de inteligencia era dirigido por Miguel Nazar Haro, durante el Gobierno de José López Portillo.
De acuerdo con El Universal, la media docena de documentos desclasificados también reportan los nombres de políticos que más adelante ocuparían cargos como secretarios de Estado en las administraciones de los gobiernos de Miguel de la Madrid Hurtado y de Carlos Salinas de Gortari.
En apoyo a Miguel de la Madrid; en el primer reporte, fechado el 8 de abril de 1982, en el entonces Distrito Federal, elementos de la agencia del Estado mexicano, antecesora del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), indicaron que en un evento del entonces candidato Miguel de la Madrid, Colosio presidió junto con media docena de destacados priistas, entre ellos Emilio Lozoya Thalmann (padre de Emilio Lozoya Austin, exdirector de Pemex y hoy prófugo de la justicia por posibles actos de corrupción), su apoyo al candidato presidencial.
Tres años más tarde, en un reporte fechado el 28 de febrero de 1985 en Hermosillo, Sonora, se dan los pormenores de los nombres de los siete precandidatos del PRI a diputados federales.
Entre los que se encontraban en la lista aparecía el joven Luis Donaldo Colosio Murrieta.
El 20 de octubre de 2000, todavía en el sexenio de Ernesto Zedillo —quien había sido designado como candidato presidencial tras el asesinato de Colosio Murrieta— decretó la reserva del expediente, en el que se concluía que Mario Aburto Martínez fue el autor material del crimen y que lo hizo sin un móvil político.