AGENCIA
Canadá.- A la extensa lista de estatuas y monumentos extraños, se ha unido una que representa un “Cheeto”, un tipo de botana que se caracteriza por su color naranja y sabor a queso.
La curiosa escultura de cinco metros de altura fue colocada en Cheadle, un pequeño pueblo de Canadá que recibió dicha “distinción” por un simple juego de palabras.
Si eres de los que se pregunta por qué fue instalada la estatua de un “Cheeto” en esta aldea de Alberta, basta que te des cuenta que el polvo color naranja que está rociado en la fritura se llama Cheetle, palabra que cuando se pronuncia en el idioma inglés suena como Cheadle, nombre de este territorio canadiense.
Esta fue la excusa perfecta para que la empresa Frito-Lay decidiera homenajear a este icónico aperitivo que ha cautivado los paladares de millones de personas en todo el mundo, la estatua no solo figura el “Cheeto”, sino también tres dedos pintados de color naranja, escenario que muchas personas han enfrentado cada que comen Cheetos.