AGENCIA
Ginebra.- En el marco del Primer Congreso Mundial sobre Desapariciones Forzadas, colectivos de familiares denunciaron la falta de atención por parte del gobierno de Claudia Sheinbaum y señalaron que las desapariciones en México son sistemáticas y generalizadas, alcanzando niveles que podrían considerarse crímenes de lesa humanidad.
Diana Iris García, representante de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila, deploró que la presidenta no ha mostrado disposición para reunirse con colectivos ni implementado medidas concretas. Según García, los casos permanecen en la impunidad, no hay apoyo para las familias buscadoras, y las condiciones de salud de los afectados se deterioran sin respaldo gubernamental.
Con más de 120 mil desaparecidos desde 1952, México encabeza la lista mundial en este delito. De los 107 mil desaparecidos registrados desde 2006, 57 mil ocurrieron en los últimos seis años, según datos expuestos en el congreso. Además, 70 mil cuerpos permanecen sin identificar en las morgues del país.
Luciano Hazan, exmiembro del Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada, destacó que, aunque México cuenta con una de las legislaciones más avanzadas en la materia, estas no se implementan adecuadamente. “La ley obliga a investigar de manera inmediata, pero las fiscalías tardan días en iniciar, lo que representa una pérdida de tiempo crucial”, subrayó.
El experto Santiago Corcuera, en su participación virtual, criticó la política de seguridad del gobierno actual, señalando que la militarización en tareas de seguridad pública es la causa principal de las desapariciones forzadas. “Desde Calderón hasta Sheinbaum, el uso de fuerzas armadas en seguridad ha generado una espiral de violencia. Una persona desaparece cada hora en México”, enfatizó.
Corcuera instó a Sheinbaum a retirar a las fuerzas armadas de estas tareas y a enfocarse en una estrategia distinta para frenar este delito.
De 120 mil desapariciones, solo 36 personas han sido condenadas por este delito. La falta de justicia refuerza lo que Hazan definió como el “crimen perfecto”. Los colectivos señalaron que el gobierno de Morena no solo ha desmantelado avances previos, sino que también ha ahogado a la sociedad civil al restringir recursos y apoyo a las organizaciones que luchan contra este flagelo.
La crisis de desapariciones forzadas sigue siendo una deuda pendiente para las autoridades, mientras los colectivos y expertos exigen un cambio inmediato en las estrategias de seguridad y justicia.
