Córdoba.- El gobernador Javier Duarte de Ochoa acudió a la eucaristía dominical, en compañía de los colonos de San Román, quienes se encontraban al interior de la parroquia del Espíritu Santo.
Tal y como han sido las últimas visitas sorpresa del Mandatario, arribó a la localidad sin escolta ni chofer que lo esperara, mismo que, sin gozar de preferencia alguna, al ingresar a la parroquia, buscó un espacio disponible y se ubicó en un costado de la iglesia.
Rodeado de los feligreses, e inclusive al momento del llamado a la comunión, el Gobernador se formó al igual que los demás católicos y esperó su turno para recibir el cuerpo de Cristo.
Al término de la misa ofrecida por el presbítero Domingo Ortiz, de quien Duarte de Ochoa se dijo amigo y quien inclusive lo comprometiera ante los asistentes a continuar con los proyectos para la zona, el Gobernador señaló que el único objetivo de su visita fue para estar en contacto con su gente.
“Soy un parroquiano más de esta ciudad, vengo a escuchar misa y estar aquí con mi gente, como lo que soy, orgullosamente un cordobés”.
A pocos días de iniciado formalmente el periodo de campañas electorales, comentó que sin duda éstas se han logrado desarrollar bajo un ambiente de paz y civilidad, con miras a que durante todo el proceso prevalezca la concordia para que los ciudadanos puedan participar con toda libertad en las elecciones.
Luego de un breve acercamiento con representantes de los medios de comunicación, el Ejecutivo del Estado aprovechó para atender algunas demandas de los ciudadanos, posteriormente se reunió en privado con el párroco, antes abandonar el templo católico.
Yessica Martínez Argüelles
El Buen Tono
