En un discurso contundente en el marco del arranque nacional de Fertilizantes para el Bienestar, celebrado en la tenencia de Zirahuén, Michoacán, la presidenta Claudia Sheinbaum envió un mensaje claro a los posibles agresores: “¡Que nadie se atreva a violar nuestra soberanía!”. Esta advertencia, dirigida especialmente a la administración de Donald Trump, llegó en un momento de tensión política internacional, en el que las políticas migratorias de Estados Unidos podrían afectar a México.
Durante su intervención, Sheinbaum destacó que su gobierno permanece vigilante ante las amenazas de deportación que podrían afectar a miles de mexicanos en Estados Unidos. Además, enfatizó que los consulados mexicanos están reforzando su capacidad para ofrecer apoyo jurídico a los connacionales que lo necesiten.
“El pueblo mexicano está unido en defensa de nuestra patria”, aseguró la mandataria. “Aquí estamos juntos y juntas, que nadie se atreva a violar la soberanía porque México es un país libre, soberano e independiente, y las y los mexicanos siempre estamos para defender a nuestra patria”.
La presidenta también rindió homenaje a los migrantes mexicanos, calificándolos como “héroes y heroínas de la patria” por su incansable trabajo en el extranjero y el apoyo económico que brindan a sus familias mediante las remesas. En este sentido, subrayó la importancia de estos recursos, señalando que el año pasado, México recibió 65 mil millones de dólares en remesas, lo que representa el 20% de los ingresos de los migrantes, mientras que el resto permanece en Estados Unidos, contribuyendo a su economía y al pago de impuestos.
Sheinbaum aprovechó la ocasión para reflexionar sobre los estragos del neoliberalismo en México, haciendo alusión a la privatización de Fertimex, que resultó en la desaparición de la producción nacional de fertilizantes, y enfatizó que su gobierno trabaja en recuperar estas capacidades productivas, al tiempo que fortalece iniciativas como Leche Diconsa y Alimentación para el Bienestar.
Con un llamado a la unidad nacional y a la defensa de la soberanía, la mandataria concluyó su discurso, reiterando que los mexicanos y las mexicanas son la columna vertebral de la economía estadounidense y, al mismo tiempo, el motor de la prosperidad de México.
