Córdoba.- Mientras el Gobernador sigue haciéndole al Fiscal, y se ofrece de testigo para que no suelten a Duarte, la región Córdoba-Orizaba sigue en poder de la delincuencia y los delitos violentos: asesinatos, balaceras, ejecuciones, mantienen en vilo a la población
La “ola” de violencia ha dejado al menos 10 asesinados en las últimas 72 horas, la zona Centro está teñida de sangre, mientras Jaime Téllez Marié permanece impávido, sin capacidad de reacción, con sólo un detenido.
La racha de violencia comenzó la madrugada del domingo, cuando cuatro jóvenes vecinos de Orizaba fueron baleados mientras viajaban a bordo de un taxi sobre la autopista Córdoba-Orizaba, a la altura de la localidad Buenavista.
La noche del lunes la delincuencia siguió imparable, cuando cuatro hombres fueron rafagueados afuera de un bar de la avenida 11 en Córdoba. Tres murieron y el cuarto resultó herido. Un presunto atacante fue detenido. La “ola” de violencia prosiguió el martes en Paso del Macho; el jefe de plaza de Los Zetas, Miguel Díaz, El Kínder, se enfrentó a balazos con Fuerzas del Orden.
Más tarde falleció en un hospital y su esposa también murió, al resultar herida durante la refriega.
Sin capacidad de respuesta, el caduco e inepto Secretario de Seguridad Pública fue enterado, como todos los veracruzanos, de que al día siguiente, el miércoles, tres jóvenes menores de edad fueron atacados a balazos en la colonia Santa Cecilia de Córdoba. Uno murió instantáneamente, otro falleció ayer en el hospital, mientras la tercera víctima sigue hospitalizada. Los agresores escaparon con toda impunidad.
Ayer por la mañana, vecinos del CDO en Orizaba vieron interrumpida su tranquilidad por una balacera entre policías. Trascendió que, a la altura de las Cumbres de Maltrata, un camión de carga fue interceptado por sujetos fuertemente armados, quienes amagaron al conductor para después despojarlo de su unidad.
Y también ayer, por la noche, un hombre fue asesinado de 12 balazos cuando circulaba en su auto rumbo a Tranca de Tubos, en Córdoba. Simultáneamente, en Nogales, dos grupos rivales se enfrascaron en una balacera y persecución, causando pánico entre los habitantes. En ninguno de estos dos casos hubo detenidos.
A los 8 asesinados a balazos, se suman dos personas que fueron encontradas muertas con signos de violencia: de oficio taxistas, uno apareció en Tapia y otro en Agustín Millán, ambos en Córdoba. De todos estos hechos de violencia sólo hay un detenido, ante la evidente incapacidad del inepto y caduco Jaime Téllez Marié.
¿Qué espera el Gobernador para despedir al Secretario de Seguridad Pública?
¿Cuántos muertos más necesita para hacerlo?