Mariana g. Hernández
el buen tono
Río Blanco.- Un promedio de 50 constructoras han cerrado sus puertas en la región, derivado a la inflación, a la situación económica, la falta de insumos y materias primas, como lo es el acero que su precio se disparó más de un 200 por ciento, así lo reconoció el empresario del ramo de la construcción y ferretero, José Manuel
Estrada Trejo.
Explicó que cuando los materiales van aumentando su costo, obviamente hay empresarios que no invierten y esto ha provocado que cada vez sea más lenta esta actividad y como consecuencia existan obras detenidas, tanto en el sector público como en el privado.
“Están vendiendo sus equipos, su maquinaria, cerrando sus oficinas, y muchos han caído incluso en impago y no están pudiendo sostener su actividad. Y debido a que el sector de la construcción es uno donde mayor mano de obra ocupa; te puedo decir que es mucho el personal en este momento está desempleado, un promedio entre 30 y 40 personas por empresa”, señaló.
Lamentó que esta situación cada vez se agrave más, porque se ve un sector público que no está decidido a invertir, y por otro lado los privados ante la falta de materiales y el incremento de los costos están esperando una mejor oportunidad.
Reiteró que 2022 es el peor año para la construcción y los meses que acaba de transcurrir las constructoras están operando en un 20 y 25 por ciento de su capacidad, y para lo que resta del año no se ve que esta
situación mejore.
Finalmente, Estrada Trejo comentó que no cuenta con ningún incentivo y apoyo por parte del Gobierno del Estado, por el contrario, para el sector de la construcción se aplicó una veda en el sector bancario, no hay créditos y no se está incentivando la economía para este gremio.