Científicos chilenos incorporaron laAntártida al proyecto continental “De polo a polo”, que busca recopilar datos de las variaciones en la temperatura de los océanos Atlántico y Pacífico a lo largo de todo América.
En el marco de la Expedición Científica Antártica (ECA) 55, llevada a cabo entre enero y marzo de este año, los especialistas ubicaron por primera vez una serie de sensores biométricos para medir la temperatura de las aguas que rodean el continente helado.
Esta iniciativa se integra en el esfuerzo internacional de más de 30 investigadores de diferentes países americanos para compilar datos de zonas concretas y compartirlos para generar bases de datos continentales con las que poder trabajar.