AGENCIA
Pekin.- China se negó ayer a los llamados de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a fin de efectuar nuevas investigaciones en su territorio en relación los orígenes de Covid-19, con el argumento de que apoya un enfoque “científico” y no “político” para establecer cómo se inició el virus.
Los primeros enfermos se identificaron a finales de 2019 en la ciudad china de Wuhan; desde esa fecha, el virus se extendió por el planeta y dejó a su paso más de cuatro millones de muertos hasta ahora y graves consecuencias en las economías mundiales.
Los científicos están luchando por rastrear su origen.
¿Transmisión de un animal? ¿Fuga de un laboratorio chino? Pekín se opone firmemente a esta última hipótesis, ya que no quiere parecer responsable de la pandemia.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud declaró ayer que integra un nuevo grupo para rastrear los orígenes del Coronavirus que ataca al mundo.