AGENCIA
Internacional.- La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, reafirmó el compromiso de su país para fortalecer la relación comercial con México luego de que la presidenta Claudia Sheinbaum anunciara un plan para sustituir algunas importaciones de productos chinos por manufacturas locales.
“El mantenimiento de vínculos económicos y comerciales estables y sólidos satisface las aspiraciones comunes de ambos países y sirve a los intereses de largo plazo de todas las partes. China está dispuesta a trabajar con México para mantener el sólido impulso de nuestra cooperación comercial y económica bilateral e impulsar el desarrollo de ambos países”, declaró Mao Ning en conferencia de prensa.
Durante la Mañanera del Pueblo del pasado 22 de noviembre, la presidenta Sheinbaum detalló que su gobierno desarrolla un plan para reducir la dependencia de importaciones chinas, una idea planteada inicialmente por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
El plan surge tras quejas del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, quien señaló que México podría estar funcionando como un canal para la entrada de productos asiáticos a Norteamérica. En respuesta, Sheinbaum explicó que el proyecto involucra al secretario de Hacienda y al secretario de Economía, quienes buscan incentivar la producción local o de empresas norteamericanas y, en su defecto, de otros socios internacionales, como Europa.
“Ese es un plan que tenemos: sustituir esas importaciones que vienen de China y, en su mayoría, producirlas en México”, señaló Sheinbaum.
A través de su cuenta oficial de X, Mao Ning subrayó que la relación entre ambos países se basa en la confianza y ha sido beneficiosa para diversos sectores económicos.
“China y México son buenos amigos que confían entre sí y buenos socios que buscan el desarrollo común. Las importaciones de China han desempeñado un papel importante en el impulso del desarrollo de la industria manufacturera de México y la mejora de su competitividad en el comercio exterior”, destacó la portavoz.
El anuncio abre una nueva etapa en las relaciones económicas entre ambos países, marcada por el reto de equilibrar intereses bilaterales y el impulso al desarrollo interno de México.