AGENCIA
Arabia.- Sergio “Checo” Pérez ganó el Gran Premio de Arabia Saudita y se quedó cerca del liderato del campeonato mundial de Fórmula 1, al estar un punto por debajo de su compañero de equipo Max Verstappen.
Sí, Checo tiene 43 puntos en la temporada, mientras que Mad Max, que entregó una gran carrera con remontada de 13 posiciones, apenas logró llegar a los 44 puntos con la bandera a cuadros.
Todavía es muy temprano para cantar victoria, pero “Checo” ha logrado un paso importante en la búsqueda de su principal sueño: el de ser campeón del mundo. Por lo pronto, el ganarle a su compañero en la carrera es un resultado importante y deja en claro un mensaje: no será segundo piloto, va a competir por todos los puntos, sin importar si su rival tiene sus mismos colores.
En la arrancada, Fernando Alonso tuvo la cuerda y le ganó la punta a “Checo”, quien no tuvo que presionarse para recuperar la delantera, ya que el asturiano se encontraba mal acomodado en la parrilla de salida, al estar su monoplaza más hacia la izquierda, con lo que se le penalizó con cinco segundos, los cuales le dijeron que podría cumplirlos en su primera parada a los pits.
De cualquier manera, el mexicano encontró la forma de volver al puesto de honor, al rebasar a Alonso en la vuelta 4, en la sección de la primera chicana, aunque en el proceso castigó un poco sus neumáticos.
Para la vuelta 19, Aston Martin le reportó un problema a Lance Stroll, quien se quedó varado en la curva 13, con lo que tuvo que entrar el virtual safety car, aunque luego cambiaron a un auto de seguridad físico.
Sobre la decisión, la FIA explicó que se hizo debido a que los primeros ángulos de cámara no les daban una posición exacta del auto detenido, por lo que se optó por lanzar el safety car al ser considerada la opción más segura.
Fue ahí que Pérez aprovechó la bandera amarilla para cambiar sus neumáticos medios por los compuestos duros, con la estrategia de acabar la carrera con aquellas gomas. La carrera se relanzó en el giro 21, con Checo en la punta, seguido por Fernando Alonso, George Russell en tercero y Max Verstappen como el más beneficiado, ya que iba en la cuarta posición tras comenzar la carrera en la decimoquinta posición.
Para la vuelta 24, Mad Max superó a Russell, con lo que entró a puestos de podio, mientras que Alonso iba cediendo ante la velocidad del neerlandés, quien había reducido décimas en cada giro y superó al español justo a la mitad del Gran Premio de Arabia Saudita.
Parecía que todo se iba a reducir en un 1-2 de Red Bull Racing y más de 10 segundos de ventaja sobre el Aston Martin de Fernando Alonso… la única duda era si el tapatía iba a superar a su compañero de equipo o si el neerlandés iba a gestar otra histórica carrera en su joven trayectoria.
Verstappen le arrebató la vuelta más rápida en la 28, aunque “Checo” la recuperó en el giro 30. Para la vuelta 38, Max reportó una vibración en su auto, pero “Checo” también se quejó de que sentía que el pedal de freno estaba más flojo y tenía que pisarlo más duro para que funcionara. Nervios a tope, con Verstappen a poco de cuatro segundos de diferencia entre ambos pilotos.
Con menos de seis vueltas por correr, a “Checo” le pidieron mantener velocidad, pero el mexicano preguntó si debía seguir la indicación o presionar en busca de la victoria, dejando entrever cierta molestia a sí se trataba de una orden de equipo, a lo que le rectificaron al darle permiso de ser libre de empujar para girar más rápido que su compañero de equipo, al aumentarla de 4.3 a 5.6 segundos.
La victoria estaba en el panorama. En la última vuelta, Max Verstappen le quitó la vuelta rápida, quien mantuvo la ventaja de un punto.