DE LA REDACCIÓN
EL BUEN TONO
FORTÍN.- La Comisión Federal de Electricidad (CFE) utiliza un helicóptero Bell 412 para la supervisión de líneas de alta tensión desde Temascal, Oaxaca, hasta Nogales, pasando por la barranca de San Miguel en Fortín. Sin embargo, este tipo de aeronave es innecesaria para la tarea y representa un gasto excesivo, ya que su operación es carísima y su capacidad para 15 pasajeros es completamente desproporcionada, pues sólo viajan el piloto y un supervisor.
El Bell 412, arrendado por Textron Co., vuela todos los días con un costo de operación altísimo, cuando existen alternativas mucho más económicas, como los Robinson R22 o R44, que son de pistón y cuyo costo por hora de vuelo es hasta 10% menor. Es como usar una Suburban para ir a comprar pan todos los días a Tehuacán: un derroche absurdo de recursos públicos.
Además del sobreprecio en la renta, la contratación de aeronaves sobredimensionadas es una práctica que ha contribuido a la deuda de la Comisión Federal de Electricidad, igual que ocurrió con Pemex.
Así son las tranzas en el gobierno y así le roban a la CFE pagando altas horas de vuelo de supervisión de líneas con aparatos que no son los adecuados, es un insulto para México y además un exceso, pero lo hacen a propósito, para cobrar más caro y robar más.
